El Salto, una maravilla muy cerca de Tegucigalpa

Esta semana les comparto nuestra experiencia explorando la cascada “El Salto” y sus alrededores.

Antes que nada quiero hacer una mención especial a este lugar: para tener las características que tiene y para estar ubicado tan cerca de Tegucigalpa, me extraña lo difícil que fue encontrar información acertada sobre cómo llegar y qué ofrece. Espero esta reseña les ofrezca la suficiente información para llegar por su cuenta; en verdad vale la pena darse la escapadita.

La cascada El Salto (o Salto de Ángel, como he encontrado le llaman en algunas publicaciones) está ubicada en la Villa de San Antonio, departamento de Comayagüa. Si parten desde Tegucigalpa, toman la carretera al norte y justo antes del peaje de Zambrano doblan a la derecha (gracias al proyecto Recorre Honduras, el desvío está señalizado, solo estén pendientes y recuerden que si llegaron al peaje es porque se pasaron). Una vez en el desvío el recorrido es de unos 20 minutos hasta el punto en donde pueden dejar su carro para comenzar la caminata. Para esta excursión, les recomiendo llevar carro alto porque se pasa por un par de quebradas en el camino, su carro turismo les agradecerá no haberlo elegido.

La cascada está ubicada en un cañón, pueden tomar dos recorridos, uno que es accesible en su vehículo (si la vemos de frente, sería el lado izquierdo), y uno donde es necesario caminar alrededor de 30 minutos (lado derecho).

Por el lado izquierdo, a la fecha de nuestra visita, estaban en proceso de construcción de una represa, así que hay mucha maquinaria y equipo de construcción en el lugar; les recomiendo ir un domingo cuando no hay nadie trabajando y el lugar está vacío. Para entrar hay un portón con un rótulo que dice “prohibido el paso”, nosotros hicimos un par de consultas y los guardias del lugar nos recibieron sin ningún problema; no dejen que el rótulo los detenga pero repórtense con las personas encargadas de la vigilancia para evitar problemas. Si van en carro no deberían tener problema en llegar, hay un amplio parqueo y el mirador está a unos cuantos metros de donde dejan el carro.

Para llegar por el lado derecho, dejamos el carro parqueado cerca del portón (el mismo que mencioné antes que tiene un rótulo de “prohibido el paso”), de allí comienzan la caminata por la carretera principal hasta que llegan a un portón, pasan el portón y una vez dentro de la propiedad siguen el camino de la derecha, eventualmente van a llegar al mirador natural.

Sea cual sea la ruta que elijan, la vista es igual de impresionante: un cañón amplio, imponente, y la cascada El Salto en el centro; las paredes de piedra enormes y la sensación de vértigo al acercarse al risco le ponen un poco más de picante a la experiencia.

También nos dimos cuenta que vía el camino para el lado derecho, es posible desviarse y llegar a una quebrada que nos pareció súper bonita, tranquila y con buena vibra ¡qué bueno que decidimos salirnos del camino y explorar un poquito más!

En fin, El Salto es un lugar encantador, considerando lo cerca de Tegucigalpa y lo accesible que es, sin duda es una buena opción para cuando tengan una tarde libre y quieran un poco aventura ¡están invitados!

A continuación les comparto el mapa y los puntos de referencia para que puedan llegar por su cuenta:

Texto y fotografías: Yamil Gonzales / Reto Ultra

9 Pensamientos

  1. Graciamaria Oyuela 20 mayo, 2016
  2. Arantxa Sánchez 20 mayo, 2016
  3. Fernando Carias 20 mayo, 2016
  4. Manuel Pavón 28 agosto, 2016
  5. anonimo 29 agosto, 2016
  6. Victor Hugo 29 agosto, 2016
  7. Luis Lagos 4 septiembre, 2016
  8. Fernando Carias 8 septiembre, 2016
  9. Eder Cáceres 8 septiembre, 2016