El cerdo que consumimos es un mamífero que vino junto con los europeos que llegaron a nuestra América a partir del siglo XVI, este animal es conocido por varios nombres pero en nuestro país su nombre más utilizado es Chancho, aunque algunos pensando que es “mala palabra” corrigen a otros exigiendo se les diga cerdos, veamos quién tiene la razón.

El chancho hoy es parte de nuestra gastronomía
La llegada del chancho
El cerdo que conocemos es producto de la domesticación del cerdo salvaje y los más antiguos registros se encuentran en China donde fueron domesticados allá por el año 4900 a.C., luego de que los chinos lograran incorporarlo a su dieta, el pobre chancho le dio la vuelta al mundo hasta que en 1493 Colón trajo 8 de ellos a nuestro continente y posteriormente Hernando Soto en 1539 desembarcó en tierra firme continental a un grupo de 13 cerdos y de ahí el porcino se fue popularizando en todo nuestro continente al punto que es conocido con al menos 45 nombres en América y entre ellos el de Chancho.
Origen de la palabra Chancho
Chancho es el nombre con que se conoce al porcino en Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Costa Rica, Ecuador, Nicaragua y Honduras, su nombre es una derivación de la palabra “Sancho” con la cual en la antigüedad se le conocía al animal en España, y Sancho viene de la onomatopeya de “Sanch” expresión con la cual las personas hacían que los chanchos se les acercaran; aunque otros afirman que Sancho viene del latín Sanctius que significa consagrado o santificado.
Sea como sea, El Chancho, es uno de los componentes más importantes de nuestra gastronomía, muestra de las aportaciones del viejo mundo a nuestra cultura y una palabra que lejos de ser mala es un rasgo de la historia de nuestra Honduras, así es que llamemos al chancho por su nombre.